Recapitulando dos años de devastación científica, social y humana

Recapitulando:

-Las empresas farmacéuticas intentan en vano durante décadas conseguir la aprobación de una nueva técnica, la ARNm, juzgada demasiado peligrosa y sistemáticamente rechazada.

-Llega una pandemia de un virus filtrado -accidentalmente o no- de un laboratorio chino, y se dan aprobaciones de emergencia para producir una vacuna sobre él.

Nadie en el mundo sabe o se atreve a decir por qué se eligieron estas tecnologías en lugar de las que ya han demostrado ser fiables y eficaces en el pasado.

-El virus y su respectiva vacuna son puestos bajo secreto militar.

La gestión sanitaria del fenómeno también adquiere un carácter militar.

La sociedad asume una postura marcial.

-La comunidad científica está perfectamente al tanto de que ninguna vacuna podrá detener una pandemia de coronavirus, pero no se pronuncia.

Los que lo hacen son prohibidos y declarados dementes.

Los estudios adversos se invalidan y se los hace desaparecer de la literatura.

-Como premisa de esto:

Los fondos internacionales financian a las empresas farmacéuticas.

Las empresas farmacéuticas financian las revistas científicas autorizadas, las universidades de investigación, los organismos nacionales de control de medicamentos y los virólogos que aparecen en televisión.

La Organización Mundial de la Salud, que pertenece de facto a un particular, financia y es financiada con fondos de inversión.

-Como premisa de esto: recortes de 37.000 millones de euros en Sanidad durante diez años.

-Se impide el tratamiento precoz, se suspende, se inhabilita y se demoniza a los médicos que se atreven a administrar medicamentos que siempre se han utilizado contra cualquier otro coronavirus.

-Los protocolos desarrollados para el virus “padre” del nuestro, el Sars Cov1, se hacen desaparecer

-Se estipulan contratos secretos entre los Estados y las empresas farmacéuticas para la producción de estos fármacos de emergencia.

 Sólo después de presiones legales se “hacen públicos”, es decir, se publican páginas y páginas de líneas tachadas para “proteger los secretos de la empresa”.

-Las empresas farmacéuticas niegan el acceso a los datos de las investigaciones realizadas para producir esos fármacos.

Sólo después de la presión legal se difunden, a cuentagostas, revelando una miríada de efectos adversos ya contabilizados, ensayos falsificados y, sobre todo, la incapacidad para detener la transmisión de la infección.

-Se impiden las autopsias para investigar la naturaleza del virus.

-Los informes sobre efectos adversos se inhiben y quedan relegados al rango de sugestiones psicológicas.

-Los hospitales comienzan a recibir ríos de dinero que se cuenta diariamente para la recuperación de pacientes con Covid que antes quedaban en espera.

 Para contar a cualquier persona como paciente covídico se declara como tal a los que están enfermos con cualquier otra patología.

Los datos nacionales sobre la evolución del virus están completamente desordenados.

-Los médicos y los santones de la vacunación cobran a manos llenas.

-El Parlamento se ve privado de poder y esclavizado por unanimidad a un hombre rodeado de sus secuaces.

-Se promulgan decretos que establecen comportamientos ilógicos y sin fundamento científico.

-Los medios de comunicación nacionales y las personas influyentes participan a tambor batiente y se transforman en el megáfono personal del gobierno.

-Se suspende e inhabilita a los médicos que dan exenciones, aunque estén justificadas, y se obliga a los ciudadanos en cuestión a recibir el suero, aunque sea en contra de su salud, todo ello haciendo firmar a las autoridades sanitarias y al Estado un documento que les exime de responsabilidad.

-Se instituye un pase que otorga derechos civiles elementales a quienes recibieron el fármaco y los niega a quienes no quisieron recibirla.

-Se desencadena a sabiendas una campaña de lavado de cerebro colectivo con la persecución de un sector de la población contra el otro.

La sociedad se desgarra, las familias y las amistades se destruyen.

Los que no son manipulados son cómplices, los que no lo son se les excomulga.

-Los tribunales constitucionales y el poder judicial no mueven un dedo, secuestrados a su vez por la presión de la seguridad.

-Los sindicatos aprueban sin pestañear las disposiciones contra los trabajadores sancionados por no haber participado en la experimentación masiva.

-El Foro Económico Mundial se presenta oficialmente en el Palazzo, recibido por Draghi en la persona de Schwab.

-En el interín se torna evidente que los fármacos a ser introducidos y para los cuales se reconfiguró la sociedad no están haciendo su trabajo.

Se niega y mistifica sistemáticamente y se encubre psicológicamente la apariencia con la lealtad hasta allí fabricada ad hoc.

-Se niega la protección de los anticuerpos naturales en aquellos que han enfermado y, por tanto, se ven obligados a vacunarse de todos modos.

-Las nuevas variantes, más leves, suplantan a la más grave, junto con la cobertura de anticuerpos derivada de la infección, actúan como vacunas naturales, la pandemia cae: se otorga el mérito a la vacuna.

-Silencio y connivencia de los “intelectuales”.

-Manifestaciones de “disidentes” impedidas, obstaculizadas y demonizadas.

En algunos casos son golpeados por la policía, detenidos o deportados.

En otras partes del mundo, sus cuentas bancarias están congeladas.

-El tejido productivo italiano se hace pedazos.

Quizás me he olvidado algo.

Yo diría que habría durante años trabajo para una comisión de investigación

Si solamente no fuera instituida por los mismos que participaron en esta debacle.

Publicado originalmente en italiano el 15 de noviembre de 2022, en https://www.marcotosatti.com/2022/11/15/ricapitolando-due-anni-di-devastazione-scientifica-sociale-umana/

Traducción al español por: José Arturo Quarracino

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